El estado de alarma ha llevado aparejado el cierre de bares, lugares que se pueden echar de menos como espacios de ocio y esparcimiento pero cuya clausura temporal causa, como asĂ ha sido, un inconveniente añadido a quienes están en primera lĂnea de batalla, como son los sanitarios y la PolicĂa Local, en nuestro municipio.
La cuestiĂłn es que con el decreto por el estado de alarma la cafeterĂa del Hospital de Alta ResoluciĂłn abre hasta mediodĂa por lo que para las guardias de mĂ©dicos, enfermeros, celadores, agentes de seguridad conductores de ambulancia, no pueden desplazarse a ninguna cafeterĂa para cenar. Hecho similar, aunque en menor nĂşmero de afectados ocurre entre los efecticos del Cuerpo de la PolicĂa Local, la repercusiĂłn es menor porque la mayorĂa tienen su residencia en Puente Genil. Lo cierto es que entre cuatro y seis agentes cada noche y entre 15 y 30 empleados del hospital, un grupo de hosteleros de la zona realiza, por turnos, bocadillos, hamburguesas, pizzas, kebah, patatas asadas, ensaladas a un precio bastante inferior al de venta, es decir un 30% más barato. Y el coste diario durante este mes y hasta que finalice el confinamiento, lo está asumiendo otro empresario, de momento se ha desembolsado de unos 2.500 euros para este fin altruista y generoso.
Los negocios implicados que secundan esta iniciativa poniendo la mano de obra y abaratando notablemente sus costes son sus gerentes son CafeterĂa Premiun (se encarga de preparar de lunes a miĂ©rcoles), Tigran (kebah y otros, jueves y viernes), mientras que la pizzerĂa La Toscana hace lo propio ( sábados y domingos). . El empresario, Antonio, que no quiere que desvelemos su identidad nos cuenta que “cuando empezĂł el confinamiento cerrĂ© mi negocio, y como habĂa comprado varias cajas de guantes, en previsiĂłn, me pareciĂł que serĂa más lĂłgico donarlas al hospital”. Al llegar “les preguntĂ© que donde cenaban y me dijeron que no tenĂan sitio”. Por tanto, sobre la marcha, se le ocurriĂł la iniciativa. Y lo hizo como “una motivaciĂłn personal”. Lo más emotivo e inesperados es “cuando la primera vez al llevar la comida salieron todos a aplaudirlo”.
Esta situación va para largo “pero ha asumido el compromiso de continuar asà hasta que termine el confinamiento”. La respuesta a la pregunta evidente del porqué , lo tiene claro, ”por solidaridad en estos tiempos que corren hay que dar un paso al frente y asà se puede conseguir escalar montañas”.