Las visitas y reuniones entre familiares y amigos que vivan en una misma provincia se permitirán a partir del próximo 11 de mayo, siempre y cuando esa provincia cumpla los requisitos para poder pasar a la fase 1 del ‘Plan de Transición hacia la nueva normalidad’ que ha diseñado el Gobierno y que tienen que ver, entre otros marcadores, con la evolución de la epidemia en ese área geográfica y su capacidad para reaccionar ante un rebrote, han especificado fuentes del Ejecutivo.
Una orden ministerial regulará no obstante cómo y por cuánto tiempo podrán producirse estos contactos sociales con las personas mayores o más vulnerables a la enfermedad de la COVID-19 por tener patologías previas. El Ejecutivo quiere evitar a toda costa que los grupos más amenazados por el nuevo coronavirus se vean expuestos a riesgos innecesarios por el aumento de los contactos sociales en ese periodo.Pero para todos los demás, será posible desde la fase 1 del llamado plan de desescalada quedar o visitar a familiares y amigos en sus domicilios respectivos o en terrazas de bares y restaurantes que podrán abrir para entonces con el 30% de las mesas que disponían la temporada anterior.
Las visitas de las personas mayores en residencias geriátricas no se podrán recuperar hasta la última fase del plan de transición, aquella que podría iniciarse en el entorno del 8 de junio en aquellas provincias que cumplieran los criterios establecidos.
En la fase 2 sí se podrían efectuar en cambio visitas a centros para personas con discapacidad o en viviendas tuteladas.En ningún caso se podrá viajar de una provincia a otra hasta finalizada la fase de transición que, si todo va bien, debería culminar a finales de junio, según las previsiones del Ejecutivo. Ni siquiera serán posibles los desplazamientos entre provincias que estén en la misma fase del camino hacia la llamada ‘nueva normalidad’, precisan fuentes gubernamentales.Tampoco, por tanto, se prevé abrir las fronteras con los países vecinos en esta fase de transición, un aspecto que en cualquier caso el Gobierno quiere resolver de forma coordinada con sus socios. En cuanto a la recuperación de los vuelos, también se está a la espera de conocer los parámetros de seguridad en los que trabaja la UE.La celebración de las bodas será posible desde la fase 2, que es cuando el plan prevé la apertura de restaurantes y hoteles, aunque limitando su aforo a un tercio de su capacidad.
Los velatorios podrán celebrarse en la fase 1 que arranca el lunes 11 de mayo aunque estarán limitados a unos pocos familiares y con protocolos para mantener la distancia mínimo de seguridad. Se ampliarán a la participación de un mayor número de personas en la fase 2.Los gimnasios podrán abrir en la fase 1, pero sólo para actividades que puedan realizarse de formaindividual y con cita previa. En la fase 2 ya podrán abrir albergando a más usuarios al mismo tiempo.Las peluquerías podrán abrir desde la fase 0 que arrancará de manera general en toda España el 4 de mayo. Se podrá acudir a ellas con cita previa, al igual que otros establecimientos y comercios que puedan atender a sus clientes de esta forma individualizada y siempre y cuando puedan garantizar las medidas de seguridad con mamparas, vitrinas u otros elementos de protección. Estos establecimiento deberán ofrecer un horario de atención preferente para los mayores de 65 años. Será obligatorio el uso de mascarilla y guantes cuando se requiera entrar en contacto con el cliente. A partir del 11 de mayo –en aquellas provincias que pasen a la fase 1– se contempla la apertura generalizada de comercios que no estén situados en grandes centros comerciales, pero limitando su aforo al 30 por ciento.El Gobierno concretará más adelante qué ocurre con las playas y piscinas, si se podrá acudir a ellas en algún momento de la fase de transición.