La federación reclama a la ConsejerĆa de Salud y Familias que dĆ© a conocer quiĆ©n y cómo se estĆ” decidiendo llamar a las personas a las que corresponde administrar la vacuna segĆŗn el protocolo de la Junta de AndalucĆa y la Estrategia de vacunación frente a covid-19 en EspaƱa, creada por el Gobierno central y cuyos criterios sigue la Junta de AndalucĆa.
Actualmente, y siguiendo dicha estrategia, AndalucĆa estĆ” vacunando al Grupo 5. En dicho grupo 5 se encuentran las personas vulnerables por su edad, y a su vez estĆ” dividido en tres subgrupos: grupo 5A, con personas mayores de 80 aƱos; grupo 5B, personas de entre 70 y 79 aƱos; y grupo 5C, con personas de edades comprendidas entre 60 y 69 aƱos. Teóricamente el criterio a seguir dentro de cada subgrupo es la edad de los usuarios, siendo el orden de mayor a menor.
Sin embargo, FACUA AndalucĆa ha tenido conocimiento de que hay usuarios de mayor edad que aĆŗn no han sido llamados frente a otros mĆ”s jóvenes dentro del mismo Grupo 5 y sus subgrupos, y que en algunos distritos sanitarios ya se estĆ” vacunando a personas del grupo 5B mientras que aĆŗn no han sido llamados para administrarles la primera dosis usuarios del 5A.
De otra parte, mientras hay algún distrito que ya anuncia que ha finalizado prÔcticamente con la vacunación del Grupo 5A (Ôrea Sur de Sevilla), mayores de 80 años, otras Ôreas y distritos aún tienen un número importante de personas mayores pendientes de ser citadas.
Sin información
En este sentido, FACUA asegura que ni el Servicio Andaluz de Salud, ni los centros de salud, ni los distritos sanitarios, ni los propios médicos de cabecera, facilitan información sobre quién y con qué criterio se deciden los usuarios que van siendo llamados para la vacunación dentro de los diferentes subgrupos del grupo 5, ni tampoco sobre quién controla y hace un seguimiento al sistema de organización de la vacunación para evitar la inequidad y la desigualdad de acceso de los usuarios andaluces.
AsĆ, la federación advierte de que esta falta de transparencia en el sistema de vacunación y en la organización de los grupos prioritarios estĆ” dando lugar a discriminaciones de los usuarios, arbitrariedades a la hora de decidir a quiĆ©n se le administra la vacuna e incluso que se estĆ© vacunando a personas a las que aĆŗn no les corresponde.
«De igual forma, no se puede conocer si se estÔ realizando algún tipo de control del proceso para evitar este tipo de problemÔticas, al no disponer de información sobre los criterios establecidos dentro de cada uno de los grupos que indica la estrategia de vacunación» denuncia la federación.
FACUA AndalucĆa indica que la transparencia y la información son esenciales en un asunto de importancia vital como este, para que se pueda ejercer algĆŗn control que garantice que la vacuna llega primero a las personas de los grupos que mĆ”s lo necesitan y que por ello estĆ”n incluidos dentro de los grupos prioritarios.