La 56º edición del Festival de Cante Grande “Fosforito” de Puente Genil arrancó con una dolbe dedicatoria. De un lado, al Maestro , Antonio Fernández Díaz por su 90 cumpleaños quien recibió una original estatuilla en la que se habían esculpido las cinco llaves del cante, la de él fue la quinta y última. Y por otro lado, el centenario del Concurso de Granada que ganó el pontanés Diego “El Tenazas”.
En el escenario, el alcalde Esteban Morales; la diputada de cultura, Salud Navajas, Fosforito, la cantaora, Marina Heredia y la concejala de Cultura, Eva Torres.
El acto protocolario comenzó con la intervención de Antonio Fernández Díaz “Fosforito” quien dijo que “el cante flamenco es medicina del alma que serena nuestros espíritus y supone un chute de salud que da la convivencia con tantos amigos que he tenido y tengo previo intervino la diputada provincial de Cultura, Salud Navajas, quien agradeció la labor del Ayuntamiento de Puente Genil y dijo que “se trata de un evento puntero del flamenco en toda nuestra provincia y fuera de ella”.
Por su parte, el alcalde de Puente Genil, Esteban Morales, en primer lugar, agradeció la presencia de las autoridades y el apoyo de las mismas a la celebración del Festival de Cante Grande “Fosforito” y la buena acogida por parte del público y afición flamenca “siendo la primera y más importante causa por la que estamos aquí hoy y que justifica nuestro compromiso institucional para que cada 14 de agosto celebremos este gran festival para el disfrute de todos y todas”. Además, tuvo palabras para el Maestro, “Fosforito” “por su permanente presencia y calor al flamenco y a su pueblo”.
El Festival contó con la asistencia de 1.100 personas de Puente Genil y comarca. Si los platos fuertes estaban adjudicadas a Farruquito y Marina Heredia. Pues bien, se cumplieron los pronósticos, ya que los dos cada una en su hacer se metieron al público en su bolsillo, lo levantaron en varias ocasiones.
Farruquito triunfó desde su puesta en escena hasta con elenco de artistas que le acompañaron, al cante, la guitarra y a las palmas. Y sorprendió con la actuación, inesperada, de su hijo. Ambos al compás, al unísono dejaron evidencia palpable y buen regusto de la saga de “los Farrucos”, su padre y abuelo ya habían actuado en las tablas del pontanés, a lo largo de su dilatada historia.
Marina Heredia, fue otra triunfadora, con milongas de entrada suaves y con gusto, alegrías con ritmo, compás y virtuosismo de estrella del cante. Extraordinaria. Continuó por seguirillas interpretadas con sentimiento, poder y quejío clásico. Siguió con soleares con mucha dulzura rematadas con fandangos del Albaicin fenomenales. Cantes autóctonos de la mosca (Albaicín) geniales y novedosos.
El pontanés y director de la Cátedra de Flamencología, David Pino, puso la nota elegante y buen gusto en el cante , comenzó su actuación con cantiñas y a continuación soleares bien interpretadas sin llegar a entusiasmar. Siguió con unos fandangos de Huelva, dedicados su mujer en su 25 aniversario.
De forma especial el acento cordobés al Festival lo pusieron el ganador del Membrillo de Oro 2021,Bernardo Miranda con tientos, malagueña, media granaína y tangos. Y la elegancia y fuerza en la voz de Eva de Dios quien arrancó con Bulerías y a pesar de que tuve la siempre difícil labor de cerrar un espectáculo cerca de las cinco de la madrugada, gustó.
