Hace unos días el Cofrade Mayor de la Sagrada Cena de Jesús y María Santísima del Amor, Rafael Martín Riquelme, dimitía del cargo y presentaba su renuncia a la Junta de Gobierno por «asuntos personales».
Toma la decisión un año antes de que expire su mandato, si bien aún ejercerá el cargo durante la presente Semana Santa , el Día de la Cruz y posteriores. Según ha dado a conocer a este medio de comunicación, adelanta el mandato «por asuntos personales y porque he cumplido lo prometido». Es decir, «recuperar los hermanos que se habían ido de la Cofradía y sanearla, la he dejado con superávit». Tan sólo- dice- «me ha faltado recuperar el coro pero no me ha sido posible». En relación a las mejoras del paso informa que han seguido su curso «este año se estrenarán los candelabros y el próximo he dejado proyectadas las molduras».
Pasada la semana mayor, presentará la carta de dimisión al Obispado de Córdoba y a partir del 15 de abril convocará elecciones, ya que a final del mes de junio debe estar nombrado el nuevo Cofrade.
Fue elegido como Cofrade en junio de 2020, pertenece a una de las Cofradías más populares de la localidad, siendo además hermano de la Corporación Bíblica El Juicio de Salomón.
Sus principales retos son la recuperación económica de la Cofradía, traer de nuevo a los hermanos que por diversos motivos han abandonado la Cofradía en estos últimos años, y volver a ese Lunes Santo popular con la participación de todo el pueblo de Puente Genil.
Y para cumplir esos objetivos anuncia una campaña de captación de donaciones que en breve presentarán a todos los hermanos de la Cofradía y al pueblo de Puente Genil en general.