Por segundo año consecutivo la pandemia por el Covid nos priva en la Semana Santa de las estaciones penitenciales, pero que en Puente Genil se han sustituido por exposiciones para el Culto de las imágenes tutelares de las Cofradías y Hermandades, bajo preceptivas medidas de protección individual y colectivos, con el respeto por los aforos pero viviendo la Fe la «Mananta » es y seguirá siendo.Hoy Sábado de Ramos o Pasión con la virgen de la Guía en su 425ª de la advocación, su Cofrade Mayor,Francisco Benítez se despedirá de la última Semana Santa al frente de la hermandad, al finalizar en julio su segundo mandato. En su haber como principal proyecto la Casa Hermandad, situado en la calle Cantarerías.El Hermano Mayor, Francisco Avilés, cargo prorrogado por segundo año consecutivo Medalla de Oro de la corporación de Los Ataos y a la espera de recibir la de 50 años.Entre las 14 y 21 horas estará expuesta la Madre en la puerta principal, sita en la calle Madre de Dios.
Hay que remontarse a mediados del siglo XVII, hacia 1647, ya que son los primeros documentos escritos de esta advocación. Pero según, Don José Segundo Jiménez Rodríguez, antiguo cronista de la Villa, historiador y gran conocedor de nuestra Semana Santa, seguramente, ya esta imagen existiría sobre el 1595, formando parte de la Cofradía de San Cristóbal (antigua denominación de la Parroquia de Jesús Nazareno) y del Calvario. Una vez entronado Jesús Nazareno, durante unos años, formaría parte de esta Cofradía, como la Dolorosa de la misma, hasta que en 1647 sólo aparece El Terrible, como titular de ésta.
Nos tenemos que remontar a principios del siglo XVIII, para encontrar, con exactitud, la advocación Virgen de la Guía, o mejor, dicho como se le conocía, porque en realidad su verdadera advocación era la de Los Dolores, según nos dicen Don José Segundo y Miguel Romero. Y digo con exactitud, porque en años anteriores, aparece en libros de inventarios de la Cofradía de Jesús Nazareno y de la Concepción, pero no como Virgen de la Guía.
El por qué de este “sobrenombre”, proviene de que el Domingo de Ramos a eso de las ocho y media de la tarde-noche, a ésta Virgen, en la Iglesia de la Concepción (donde está ubicada actualmente) se le trasladaba a la Ermita de la Caridad (Calle Don Gonzalo) para que el Viernes Santo en el “Sermón del Paso”, buscara a su hijo Jesús Nazareno GUIADA por el discípulo San Juan, como cuenta Miguel Romero en el libro Semana Santa en Puente Genil 1911. De ahí, el cariñoso “sobrenombre”, Virgen de la Guía, a la Virgen de los Dolores, como se denominaba entonces.
Esto como muchas otras cosas, con el devenir de los años, desapareció. Y en el año 1974, la corporación “Los Ataos”, reorganizó la Cofradía de la Virgen de la Guía, pero ya con esa advocación oficial. Y además, abriendo la Semana Santa de Puente Genil, el Sábado de Ramos; como antaño lo hacía en su traslado a la Caridad el Domingo de Ramos.
