El teatro Circo, de forma excepcional, acogió la celebración del Pregón de la Semana Santa de Puente Genil 2021, ya que permite un mayor aforo, reducido por las medidas de seguridad contra la Covid-19. El acto comenzó con la distinción por parte de la Directiva de la Agrupación al pregonero 2019, Agustín Moyano y los Mananteros, 2020 y 2021 Francisco Carmona y José M. Martínez, todos precedidos por las emotivas palabras del presentado el hermano directivo, Lorenzo Reina. El pregonero fue designado por Las Autoridades Judáicas a quien la Agrupación de Cofradías otorgó el pregón y estuvo presentado por su hermano de corporación, José González quien subió al escenario acompañado del hijo del pregonero, Jorge de diez años vestido con el capillo y túnica de la Hermandad de las Angustias.
Anás, Caifás, Herodes y Pilatos, bajo una enorme cuadro de las Angustias, un centurión y Daniel Matas, quien trufó con su teclado el pregón ·»de los recuerdos».
«Una Semana Santa dormida, sin verbo»…Tras el preámbulo de agradecimientos, así arrancó el pregonero Jorge Merino Alcaide su pregón, el de La Judea.
Durante la disertación tuvo constantes alusiones al recuerdo, a la esencia de una Semana Santa sin procesiones, sin figuras ni nazarenos en las calles, en clara referencia a la Pasión de la pandemia.
Relató las vivencias de un niño cualquiera, la de él mismo, la de sus hijos…recordando a las madres mananteras, los escenarios que generación tras generación se repiten «familia, tradición y terciopelo». La Semana Santa de Puente Genil «es recuerdo, piel estremecida del ausente, la llamada de una campanita, uvitas compartidas, las ermitas de tu pueblo». La Semana Santa es «fe, oración, conversión pero este año caminará pellizcada en otra Semana Santa que vive en el recuerdo».
Y se dirigió a los hermanos, «¡escucha manantero! que buscas la Semana Santa, yo soy el recuerdo, déjame abrir en este año aciago el baúl » y así explicar los motivos que llevan a «los apretujones» en una «semana santa proscrita».
En su disertación recordó «a los hermanos de la trabajadera» con la «tradición en la Cuesta Baena», en alusión al esfuerzo que realizan para portar por este recorrido a las imágenes. El Señor de la Humildad y Paciencia , el Lavatorio «hoy la madrugada sopla esta semana santa en un aire que sabe a copla, camina soñando un alma». «Soy el viento de la puente»-apuntó rememorando al Miércoles santo. La escuadra tabaco , «romanos luminosos», se refirió así al Imperio Romano que «desfila abriendo su alma al cielo».
Muy aplaudida la poesía que dedicó al Señor de la Columna que junto a las Angustias tutelan a la Corporación de la Judea. «Viva el rey eterno, viva Jesús Nazareno», recuerdo al Patrón de Puente Genil.
«Campanita, tu sonido abre mi alma y Juanillo desde el cielo abre el portón y levanta las calles de nuestro pueblo, ¡por fin vuelven los pontanos a caminar, de nuevo…!»…en una evidente llamada a quienes desde el cielo pueden interceder y velan por la tradición y los recuerdos.
Las cadenas del demonio y la muerte sonaron para rememorar la noche del Viernes santo, «noche roja que se enciende, cadenas que golpean, tambores rumores de tormento, en un lúgubre concierto, presagios de un Dios muerto».
El «barrio Bajo te abraza en una isla de sonidos», así recordó a su abuela y a la Madre de la Isla, «sé lo que es sentirse sola en la fría noche, siempre me arropo junto a ella, sola en su eterna soledad, este año reflejaros en mi caminando por la isla del recuerdo». Para finalizar su poesía dedicada a María Santísima, «iluminarla a ella es iluminar a tu abuela, y es iluminar al mismo cielo».
«Allí estaba ella, inmensa en su angustia, sentí como sus manos cantaban una nana», algunos de los versos que dedicó a la virgen de las Angustias. «Me da vida y me permite brindar con los pregoneros eternos», en alusión a la titular de la hermandad de viernes santo.Terminó el pregón llamando a los «pontanenses , ¡despertad! llegó esta extraña semana santa, la tradición es la herencia de tus muertos, rezad al Padre Eterno, sed eslabones de la cadena que sostiene a la puente».
Enmarcada la disertación con las figuras de La Judea y el calor de algo más de un centenar de hermanos, entre ellos , presidentes y cofrades de corporaciones bíblicas y hermandades; así como Medallas de Oro de la Agrupación, Directivos y representantes municipales de la Corporación local.
El pregón histórico contó con el afinado y excepcional piano del músico, Daniel Matas, los tambores de Los Apóstoles y la cuartelera de Antonio Sierra.
Manantero de estirpe, educación y convicción, Jorge Merino, es ingeniero en el Ayuntamiento de Santaella que “lleva 49 años soñando por pregones”, conocedor a pie juntillas de Miguel Romero y enamorado del pregón de Julio Cámara, es una pieza clave en su corporación, sobre todo, por el cuidado con el valioso archivo documental. Es hermano de la Purísima, Nazareno, Lavatorio, Columna y está muy unido a Las Angustias. Reúne “sangre, hermandad y cuartel Jorge Merino Alcaide.
