El defensa natural de Casariche, de 23 años, vivirá su tercera etapa en el primer equipo rojinegro.
Álvaro es un jugador muy conocido por la afición pontana. Tras formar parte del juvenil rojinegro, el Atlético de Madrid lo fichó para que se incorporara a su equipo juvenil.
Finalizada su etapa en el club colchonero regresó a tierras cordobesas, recalando en el C.D. Pozoblanco. Fue en la temporada 2018/19 cuando volvió a Puente Genil, donde estuvo dos temporadas.
En el curso 2020/21 se marchó al Ciudad de Lucena, contando con gran protagonismo y llegando hasta las semifinales del Play-Off de ascenso. Sus buenas actuaciones le llevaron a renovar con el club celeste por un año más.
La temporada pasada, sin embargo, no contó con tanta participación como se esperaba, jugando poco más de 500 minutos en los 20 partidos en los que estuvo convocado. Esto le llevaría a cambiar de aires, recalando a mitad de temporada en el C.D. Gerena, con quienes se convirtió en titular indiscutible y volvió a disputar una fase de ascenso a Segunda RFEF.
La próxima temporada volverá a vestir de rojinegro, pero para defender el escudo del Salerm, un conjunto que conoce muy bien y en el que se espera que alcance un gran nivel.