Los hechos se remontan al pasado mes de noviembre de 2016 cuando la Asociación Gatitud entrega en adopción a Gilbert, un gatito rescatado de la calle. La entrega el animal se formalizó a través de un contrato de adopción el cual recogía una seria de cláusulas que obligaban a las partes a asumir determinadas obligaciones como era la de permitir el seguimiento del animal a la Asociación Protectora, no entregarlo a terceros sin consentimiento de la misma y mantenerlo al día de vacunaciones entre otras, compromisos incumplidos por la adoptante.
Tras comprobar los incumplimientos, la Asociación Protectora Gatitud encomendó al despacho jurídico especializado en Derecho Animal, Justicia- Animales & Medio Ambiente, y en concreto a su titular la Abogada Dulce Aguilera, de Córdoba, la tarea de solicitar la resolución del contrato de adopción y la reclamación de daños morales a la adoptante.
En el día de ayer el Juzgado de Primera Instancia Nº 2 de Puente Genil ha dictado sentencia estimando las pretensiones de la Asociación Protectora y reconocimiento daños morales a la misma por valor de 400 €, pese a no estar contemplado expresamente en el contrato de adopción que se firmó.
Esta es la primera sentencia de estas características que dicta un Juzgado en Córdoba y provincia suponiendo una herramienta de gran interés en la práctica judicial, de cara a acreditar la plena validez del contrato firmado entre partes así como las consecuencias que pudieren derivarse por su incumplimiento.