Más de novecientos aficionados asistieron en la noche del 14 de agosto a la 58ª edición del Festival de Cante Grande «Fosforito», un evento celebrado en el marco de la Feria Real en la caseta municipal. El recinto mantuvo un «silencio respetuoso» hasta la culminación de este prestigioso encuentro flamenco.
El LVIII Festival estuvo dedicado a la figura de Juan García Ruiz, conocido como «Niño Hierro» (1899-1987), uno de los grandes del flamenco pontanés, en conmemoración del 125º aniversario de su nacimiento. Su legado y trayectoria quedaron plasmados en el escenario a través de una magnífica composición de Mario Quero, que presidió las tablas. Entre los asistentes destacados se encontraba la quinta Llave del Cante, Antonio Fernández Díaz «Fosforito», quien ha sido un pilar fundamental en la historia del festival, el más antiguo de la provincia. También estuvieron presentes el alcalde Sergio Velasco, los diputados Gabriel Duque, Tatiana Pozo y Esteban Morales, la concejala de Cultura y responsable de la organización, María Delgado, así como portavoces de los cuatro grupos políticos. Parte de la recaudación se destinó a la asociación Disgenil.
Despedida de Juan Ortega Chacón
El evento contó con la presentación estelar de Juan Ortega Chacón, un estudioso del flamenco que, tras más de dos décadas de participación en el festival, se despidió del mismo en esta edición. Ortega Chacón ha sido respaldado a lo largo de los años por cinco corporaciones municipales de diferentes signos políticos, todas ellas apoyando tanto su labor como la continuidad del festival.
El cantaor extremeño Edu Hidalgo fue el encargado de abrir el evento en el imponente escenario pontanés, también diseñado por Mario Quero. Hidalgo, quien recientemente ganó el Primer Premio en el Concurso Membrillo de Oro 2023, demostró por qué fue galardonado, destacando especialmente en el Premio Especial «Fosforito» al mejor zángano.
Le siguió Marina Heredia, quien inició su actuación con alegrías, continuó con farrucas, y deslumbró con tientos por tangos, seguiriyas, y culminó con un emotivo homenaje a sus raíces gitanas y granaínas.
En el ecuador del festival, la jerezana Gema Moneo ofreció un espectáculo contemporáneo, con un taconeo preciso que reflejó la fuerza y empuje que está demostrando a pesar de su juventud, logrando levantar al público pontanés.
David Pino, oriundo de la localidad, emocionó a sus paisanos con una actuación cargada de sentimiento, destacando su interpretación de un poema de García Lorca y sus seguiriyas y bulerías, acompañado por un elenco de artistas de gran nivel. Como director de la Cátedra de Flamencología de Córdoba, Pino estuvo a la altura de las expectativas en un contexto exigente.
Finalmente, María Terremoto cerró el festival con un despliegue de cantes festivos, tientos, y bulerías, mostrando su fuerza y capacidad para clausurar con éxito un evento de formato largo como este, parte del repertorio lo ofreció a capela.
Acompañaban a los cantaores del festival flamenco, que organiza el Ayuntamiento de Puente Genil, a través de su Delegación de Cultura, en colaboración con la Diputación de Córdoba y Bodegas Delgado, las guitarras de José Quevedo “Bola”, Alejandro Hurtado, José Tomás, Nono Jero, y Eduardo Rebollar.
